Las posibles variantes de una verdura versátil, rica y saludable

Cuando la cosecha se vuelve multitud, se presenta el interrogante acerca de qué hacer con tantas zanahorias. Afortunadamente, esta verdura rica en potasio y fósforo puede ser utilizada de múltiples formas; preparaciones frías, calientes, acompañadas con alimentos salados y también dulces. Es por eso que tanto en entradas, primeros platos o postres, las zanahorias no hacen distinciones.

Popularmente conocida por sus efectos de bronceado de piel y beneficios para la salud de la vista, la realidad es que las zanahorias cuentan con una interesante serie de beneficios más allá de los nombrados. Siendo una de las hortalizas más cultivadas en el mundo, esta verdura ayuda a combatir dolores de estómago por intoxicación y estreñimiento. Además, producto de sus niveles de cloro, sodio potasio y vitaminas del complejo B, puede calmar la acidez. Finalmente, cuando es consumida de forma cruda, fortalece las encías y los dientes.

Precisamente acerca de los principales métodos para sacarle todo su jugo a esta cosecha de primavera, uno de ellos es utilizarlo como snack. Tanto en la parrilla como en el horno, luego de ser condimentados alcanzan un gran sabor. Por otro lado, los pickles de zanahorias también son los preferidos de muchos. En este sentido, luego de hervirlos solo es necesario realizar un proceso con vinagre, sal y azúcar, y así quedarán listos para disfrutar.

Cómo lograr que las zanahorias se conserven mayor tiempo

Aunque se conozca la versatilidad que tiene la zanahoria para adaptarse a los diferentes platos y hasta a las bebidas, a veces el tiempo apura y las variantes no son suficientes. Es por eso que existen algunos mecanismos sumamente efectivos para alargar su vida útil. De esta manera, una de las principales técnicas para que esta verdura no pierda firmeza es colocarlas en un recipiente con agua e ir cambiándola con determinada frecuencia. Principalmente cuando el agua comience a verse turbia.

Por otro lado a diferencia de otras hortalizas que no requieren de heladera, como la papa por ejemplo, la zanahoria se conserva muy bien en este lugar. No obstante, antes de llevarlas a la heladera es necesario cortar sus hojas verdes, ya que las mismas absorben fácilmente el agua y aceleran su deterioro.

Finalmente, otra opción muy efectiva es la de congelarlas. Sin embargo, esta técnica necesita de un poco más de tiempo ya que lo ideal es realizar un proceso previo. En este sentido, para congelarlas se recomienda lavarlas y pelarlas bien para más tarde cortarlas en pequeñas rodajas. Una vez listas se hierven 1 o 2 minutos y luego se sumergen en agua bien fría. Esto permitirá cortarles la cocción. De esta manera, solo queda mandarlas al freezer en bolsas o recipientes herméticos para mantenerlas si se quieren varios meses.

También puede interesarte: "Pan integral o pan blanco: ¿Cuáles son sus diferencias nutricionales?"

Diferentes maneras de comer zanahorias

Sin malgastar el cultivo y aprovechando la versatilidad de esta hortaliza, existe una gran cantidad de recetas que tienen a la zanahoria como protagonista. Descubrí y anotá cuáles son.

Carrot Cake

Dejando atrás aquella idea de que la zanahoria debe acompañar comidas saladas, la carrot cake saca lo mejor de aquel dulzor de esta verdura. Por otro lado, si bien hay diferentes recetas, será cuestión de encontrar aquella que mejor combine con los gustos personales de cada uno. Acerca de las mismas, hay ingredientes como la canela, la nuez moscada o las pasas de uvas que pueden ser reemplazados o dejados a un lado. Por otro lado, hay un detalle muy utilizado que potencia notablemente su elaboración, y ese es el glaseado que recubre la parte superior.

Jugo de zanahoria

Ideal para los días en donde el calor se hace presente, el zumo de zanahoria es sumamente nutritivo. Esta rica manera de consumir zanahorias trae consigo grandes beneficios, por ejemplo para la piel, ya que aporta firmeza, flexibilidad y también brillo. Por otro lado, el jugo de zanahoria puede ser acompañado con diferentes variantes. Entre ellos, limón, naranja, manzana y hasta con pepino.

Snacks saludables de zanahoria

Reemplazando aquellos snacks ultraprocesados que se suelen habitar en el supermercado, los bastones resultan una variante rica y saludable para untar con quesos o humus. Asimismo, después de cortar las zanahorias pueden ser condimentadas con sal, pimienta y cocinadas al horno o a la parrilla. Acerca de este segundo tipo de cocción, el mismo le agrega un gusto ahumado espectacular.

 

Sopa de zanahoria

Si bien la temperatura puede no acompañar tanto en los meses de primavera o verano, la sopa de zanahoria es una gran opción para aquellos días más fríos. Al ser procesada esta verdura alcanza una forma muy suave como puré que puede ser acompañada con cebolla, puerro, manteca u otros agregados. A su vez, llevar adelante esta crema resulta sumamente fácil, por lo que no es necesario contar con mucho tiempo para poder concretarla.

Ensalada de zanahoria

Otra forma clásica de consumir zanahorias es aprovechando su frescura en ensaladas. A partir de alternancias en su corte se pueden generar diferentes texturas. En forma de rodajas, rayadas o en juliana, estas ayudan a variar y así también a no cansarse. Por otro lado, sus combinaciones pueden ser múltiples. Una opción sumamente refrescante es la ensalada de zanahoria acompañada con pepino. Sumándole semillas de sésamo y aceite de oliva esta variante es muy rica.