Hubo un tiempo que fue hermoso, podría comenzar diciendo un amante del pádel para remorar un tema clásico de Charly Garcia y hacer mención a aquellos tiempos en los que la actividad era furor en el país. Fueron años de ser tendencia y hasta convertirse en uno de los modelos de negocio más frecuentes durante la década de 1990.

El Pádel está de vuelta y encabeza la lista de deportes recreativos 

La gente acudía con frecuencia y en cada ciudad o barrio de las urbes más importantes, era factible encontrar una cancha de pádel. Sin embargo, tanto creció la oferta que pronto comenzó a escasear la demanda y el negocio se perdió, lo que llevó a que la popularidad por el deporte se apague lentamente, aunque Argentina siguió manteniendo su posición como uno de los países con mejor representación en el circuito de alta competencia

Si bien las paletas parecían quedar olvidadas en el fondo de algún baúl o armario, tal vez desenpolvadas ocasionalmente para algún viaje a la playa, todavía el gusto por esta actividad no estaba terminado. Es así que ya se puede hablar de una segunda ola de auge del pádel, un resurgimiento que trae consigo innovaciones muy oportunas e interesantes, desde el juego y la estructura general, para lograr sostener la popularidad en el tiempo. 

Nociones básicas para entender de que va el pádel

El pádel, que en inglés se traduce paddle, sonando casi igual en sendas lenguas,​ es un deporte moderno que guarda similitudes con el tenis, en especial en lo visual y el evidente hecho de que se trata de pasar una pelota, que es la misma en ambos deportes, por encima de una red que divide al campo en dos partes iguales. Sin embargo, dista mucho en la estructura general de su reglamento, así como la técnica, esfuerzo físico y demás cuestiones que lo constituyen.

Una de las cuestiones más propias del pádel, es que se trata de un juego de parejas. Hay tres elementos esenciales para su práctica, siendo el más obvio el campo de juego, luego la paleta (generalmente hecha de fibra de carbono) y las pelotas. Su propósito como ya se dijo es pasar la pelota hacia el campo contrario por encima de la red y lograr que pique dos veces de forma consecutiva en el suelo, para esto, se comienza con un saque que a diferencia del tenis se hace "de abajo", es decir que la paleta no se puede colocar por encima de la cintura, y es siempre cruzado, siendo solo válido cuando la pelota cae en el cuadrado determinado para el saque.

Una vez en juego, hay que mencionar que la característica más distintiva de esta actividad, está en la utilización de paredes. ¿Cómo? bueno, en el pádel existe la posibilidad de usar estas delimitaciones del campo para hacer rebotar allí la pelota y pasarla de lado, al igual que es posible dejarla picar una vez en el suelo y otra en la pared, para luego devolverla a campo rival. Justamente por eso, las canchas de pádel tienen las paredes que encierran al campo y en los últimos años, se han reemplazado por acrílicos o vidrios templados transparentes, que permiten un mejor rebote, además de facilitar la visión de los espectadores. Cabe aclarar que en caso de pegar la pelota en una pared, sin tocar el suelo previamente, el punto se termina, ya que sería algo así como tirarla afuera de los límites.

Origen de un deporte moderno

El origen del pádel, aunque pueda parecer una sorpresa, se remonta a México, más precisamente Acapulco, uno de los puntos turísticos más importantes del país y, según muchos conocedores, el más lindo de todos. Allí, en el año 1962, Enrique Corcuera, un empresario que poseía en el lugar vacacional una casa propia, se encargó de crear esta disciplina. Su inventiva lo llevó a utilizar lo que tenía a mano, siendo lo primero la decisión de utilizar una de las paredes de la casa como pared de fondo de uno de los lados de la cancha, para luego construirla en su totalidad. Levantó las paredes restantes y cerró todo el campo con vallas, evitando así la intromisión de plantas y otros tipos de molestias en el espacio del campo de juego. Para finalizar, colocó la red al medio y con dos paletas que tenía, de un estilo más playero, comenzó a jugar con pelotitas de tenis. Lo llamó: Paddle-Tenis

Al ser una persona que recibía muchas visitas y era anfitrión de otros empresarios, muchos de ellos extranjeros, rápidamente se corrió la voz de esta nueva versión de juego con paletas y pelotas de tenis. España fue uno de los lugares donde pronto penetró y comenzó a jugarse con asiduidad, al igual que sucedió en la Argentina. Esto explica porque también el poderío y dominio de jugadores argentinos y españoles en el World Padel Tour.

Las 7 claves del resurgimiento del Pádel en Argentina

El deporte busca retomar el furor de sus primeros años y ha empezado nuevamente a convocar gran cantidad de adeptos, que lo realizan de forma regular cada semana. Abajo las claves de este renacer del pádel en el país.

Cambio de superficie

Un salto de calidad muy importante que dio el pádel y que demuestra en esta nueva etapa, está en el suelo. Es que de aquel cemento puro del que se componían las canchas en los años 90, se pasó a una superficie de trama texturizada, lo que comunmente le llaman "carpeta", compuesta por hilados de monofilamento con alta densidad de fibras. Este tipo de suelo permite mayor resistencia a la tracción y cambios bruscos de movimiento que hay en un deporte tan dinámico como este, para evitar lesiones, teniendo en cuenta además que gran parte del público es amateur. Además de este tipo de superficie, también se comenzaron a implementar las de cesped sintético, que funcionan muy bien y tienen un menor costo de infraestructura y mantenimiento.

Modernización de elementos

El avance estético y panorámico que logró el pádel con la implementación de vidrio templado en lugar de paredes de cemento ha sido rotundo y categórico. La visual permite disfrutar de un partido plenamente y eso le da impulso también a las competencias, porque ya no solo es el hecho de jugarlo, sino que se puede disfrutar de mirarlo. Se suelen usar paneles de 10 mm de espesor, de 2 por 3 metros.

En las paletas, también se ha visto un significativo cambio y tiene que ver con su composición. En un primer tiempo estaban hechas de madera, con aros de aluminio en los bordes para protegerlas, luego aparecieron las de goma y fibra de carbono y en la actualidad reinan las compuestas por fibras de vidrio o fibra de lino. No tienen impacto ambiental, pero más importante aún para el juego en sí, es que no vibran al golpear la pelota, lo que repercute en una mejor capacidad y tiro. 

Accesible, de baja complejidad y social

El pádel lo tiene todo a nivel actividad recreativa. Es que se trata de un deporte al que cualquier persona puede sumarse, incluso a mayor o menor edad, mismo sin haber tocado antes una paleta, algo en lo que se aleja mucho del tenis, deporte para el cual si es necesario contar con una ténica mucho más precisa y difícil de adquirir. Su intensidad es media, lo cual también lo acerca a un público mucho más masivo y amateur, es decir sin un nivel alto de entrenamiento previo. 

Los alquileres de las nuevas canchas de pádel no difieren mucho de lo que sale una cancha de fútbol 5, por lo cual termina siendo una opción muy accesible. Por último, pero no menos importante, se trata de una actividad social, generalmente emplazada en clubes o centros que permiten luego relajarse con aperitivos y comidas. Es una excelente y divertida opción como actividad de grupo. 

La pandemia le dio un empujón

Los años de pandemia y en particular los meses de aislamiento, provocaron que las personas renueven su espiritu deportivo y de actividades al aire libre. El pádel se vio beneficiado en esa explosión de necesidad de hacer deporte, sobre todo porque no requería de reunir gran cantidad de personas, sino que un grupo de 4 alcanza y no hay prácticamente contacto. Los números de ventas de calzado, paletas y otros accesorios ligados a este deporte se dispararon y eso es una clara muestra de que en Argentina, se vive un resurgir del pádel