Las tablas en el agua suman una disciplina: ¿Conocés el Wing Foil?

Cada vez es más común observar en aquellos lugares elegidos por las disciplinas náuticas cómo algunas tablas ya no se deslizan sobre el agua sino que se elevan como por arte de magia. Más específicamente, logran entre 50 centímetros y un metro de altura, generando un efecto sorprendente y sumamente atractivo para todo aquel que se encuentre mirando.

Pero ¿qué es entonces aquello que tanto llama la atención? La respuesta está en una de las últimas innovaciones de la náutica: el hydrofoil. Una especie de aleta que se sumerge debajo del agua y permite condiciones de flotabilidad sin precedentes, dando vida y proyectando un crecimiento exponencial para deportes como el innovador wing foil.

Fusión de varios deportes

Federico aguilar es el máximo exponente del kitesurf en la Argentina y también un entusiasta impulsor del wing foil. A partir de su experiencia, trayectoria y conocimiento sobre las distintas clases y alternativas náuticas, describe este nuevo deporte: “El wing foil es una fusión de varios deportes. Por un lado, se involucra la vela con forma similar a la del windsurf pero con modalidad de kitesurf, ya que el frente es inflado, aunque sin líneas. Por otro, está la tabla, que, dependiendo del estadio de aprendizaje, varía en volumen y flotabilidad”.

“A eso debemos sumarle el hydrofoil, la parte más innovadora de la náutica”, continúa Aguilar, y puntualiza sobre el factor clave: “Se trata de un mástil que involucra la tabla con el fuselaje y las aletas, se sumerge debajo del agua y permite que en un momento determinado aquella despegue y quede suspendida sobre el agua, disminuyendo el roce, aumentando la velocidad y permitiendo navegar con mucho menos viento”, explica con lujo de detalles.

Fácil y amigable

Si bien aprender y desenvolverse en el wing foil requiere una preparación adecuada y mucha práctica, como resulta lógico en cualquier deporte, sí es cierto que sus cualidades se destacan por aportar una enorme cantidad de facilidades en comparación con otras disciplinas cercanas.

Para Aguilar, esto está claro: El wing foil viene a revolucionar porque es un deporte muy amigable de practicar y fácil de transportar. La vela chica, la tabla y el hydrofoil hacen un equipo perfecto para navegar con poco tiempo y de manera fácil. Todas las facilidades que tiene son, justamente, el motivo por el que está creciendo tan rápido, asegura.

Rápida expansión

Otro de los factores centrales de su éxito y propagación es la posibilidad de poder practicarlo en casi cualquier lugar, notable diferencia con otros deportes similares. Los distintos rincones a lo largo y a lo ancho de nuestro país comienzan a nutrirse cada vez de más adeptos.

La meca de todo esto en Argentina es San Isidro, claro, pero podés ir a Potrerillos, en Mendoza, y está explotado de este deporte. Podés ir al Lago de los Molinos, en Córdoba, y también explota. También podés practicarlo en el mar a lo largo de toda la Costa Atlántica o en el litoral, en Rosario o Paraná. Se puede practicar en río, mar y hasta en el lago de un country, y por eso también su inmenso crecimiento”, concluye Aguilar sobre esta nueva tendencia sobre el agua, literalmente hablando.

Federico Aguilar, referente argentino

El paranaense practica kitesurf desde hace más de 20 años y ha cosechado una carrera ejemplar como deportista. Es atleta argentino con representación nacional en la Fórmula Kite, la fórmula olímpica, siendo Top 1° de Argentina en 2019, 2020, 2021 y 2022. Además, es entrenador juvenil de desarrollo de la Federación Argentina de Vela para la Fórmula Kite y actualmente entrena a Catalina Turienzo, última 4a del mundo en la categoría U19.

Aguilar también toma decisiones y busca potenciar el desarrollo de los deportes náuticos en el país, y en este sentido, es el presidente de la Subcomisión de Kitesurf del Club Náutico de Paraná y representante en la Confederación Argentina de Deportes por el kitesurf.

En el último tiempo se encuentra trabajando en un proyecto nuevo en Sudamérica llamado “Navegar Multiclases”, que busca integrar todas las alternativas y clases de la náutica, entre las que se encuentra el wing foil. “Mi objetivo es seguir empujando por los deportes que están en vanguardia en el mundo, trasladarlos a la Argentina y seguir difundiéndolos”, afirma al respecto.

Deporte de competencia

La reciente expansión del wing foil genera movimientos en todos los sentidos. Por esto, se está trabajando en el mundo para colocarlo como un deporte competitivo en la World Sailing, aunque todavía no se ha instituido oficialmente.
En la Argentina, existen competencias de wing foil incluidas en el calendario de la Asociación Argentina de Kitesurf, con las modalidades de freestyle y regatas.