Animarse a una práctica deportiva diferente: las artes marciales como opción

Hay un amplio espectro de deportes que se pueden elegir para comenzar a recibir los aportes que la actividad física le otorga al cuerpo y la mente, pero por lo general la lista se acota a ciertas disciplinas que son las más populares o las que más oferta ofrecen por cantidad de personas que la practican. Hablamos de fútbol, básquet, tenis, running y hasta voley o natación. 

Sin embargo hay muchas otras opciones de deportes que pueden resultar igual de beneficiosas, aunque no tienen quizás en Argentina tanta penetración social o masividad. Las artes marciales entran dentro de ese grupo y se destacan por muchas cosas que el resto de disciplinas mencionadas comparten, pero también otras tantas que no y que entonces las distinguen como una actividad completa e interesante

Historia, cultura y deporte

Una característica muy propia de las artes marciales es su gran vínculo con la cultura de donde provienen, mayormente asiáticas, siendo tradicionales en ese sentido pero a la vez intrigantes. No solo dotan a una persona de habilidad física, sino que le brindan un bagaje cultural e histórico que permite desarrollarse en más de un sentido. Es una manera también de generar un vínculo y una identificación particular con este tipo de actividades.

5 razones que convierten a las artes marciales en una práctica ideal

Lo primero es lo más evidente y es que, al igual que cualquier otro deporte, la práctica de un arte marcial otorga salud en los aspectos físicos y mentales de una persona. En la mayoría de las disciplinas que se contemplan dentro de las artes marciales, los entrenamientos trabajan la fuerza, velocidad, equilibrio y flexibilidad de una persona, por lo que resulta un gran método para estar óptimo desde la forma física, pero también combinando con una sensación mental de paz y bienestar, reduciendo la ansiedad. 

Respeto y disciplina

Algo primordial en las artes marciales, que va de la mano con la historia y la cultura que representan, es el trabajo de la disciplina y el respeto. Desde los rituales más básicos, como es ponerse un kimono o cinturón, hasta los horarios, repeticiones, protocolos y reconocimiento constante al sensei o maestro. Constancia, responsabilidad, resiliencia, obediencia y disciplina, son los valores claves en cualquiera de estos deportes.

Cultivar la paciencia

La práctica hace al maestro, es uno de los dichos más repetidos en las clases de artes marciales, las cuales tienen rangos y niveles distinguidos en una escala ascendente, a los que se accede mediante la práctica precisamente, así como con el aprendizaje y estudio constante. Aunque parezca difícil avanzar en la estructura de cualquier arte marcial e ir evolucionando en los colores de cinturones, lo cierto es que cualquier persona que le dedique el tiempo necesario, podrá notar los resultados de su esfuerzo en un corto plazo. 

En una arena, tatami, dojo o cualquiera sea el nombre del escenario para las artes marciales, no solo se gana en habilidad, sino en confianza y seguridad para con uno mismo. La edad no suele ser un problema, lo que vuelve a estas disciplinas aptas para todo público. Concentración y debida paciencia, darán sus frutos, siendo una capacidad adquirida que se puede trasladar a muchos otros ámbitos de la vida cotidiana.

¿Son deportes agresivos?

Se suele criticar la supuesta agresividad que emanan las artes marciales, pero por el contrario terminan siendo una gran manera de canalizar la agresividad que una persona tiene de forma positiva y sana. Sean adultos o niños, todos atraviesan las prácticas descargando impulsos, malos pensamientos y otras cuestiones, funcionando así el deporte como un tranquilizante natural, que puede calmar la ansiedad también. 

Si está claro que mientras más profesional o perfeccionado el nivel, mayor será la competencia y por ende más agresivo se pone en cuanto al enfrentamiento físico. De todas maneras, la forma en la que se quiera cada persona vincular con las artes marciales como deporte, llevándolo o no hacia el costado de combates, quedará en la evaluación de cada uno

Educación física y mental

Las artes marciales buscan educar a una persona, como ya se dijo lo que se transmite a nivel historia y cultura es muy importante. Sin embargo, más allá de eso, la estabilidad espiritual que pueden brindar es un gran punto a favor. 

Yendo a lo físico, la coordinación es quizás la habilidad que mejor se potencia. Eso afecta directamente al equilibrio, por ejemplo. 

5 disciplinas de artes marciales para conocer y practicar

  • Karate
  • Taekwondo
  • Kung Fu
  • Aikido
  • Jiu Jitsu