Buenos Aires, la ciudad cosmopolita por excelencia

Una de las capitales más influyentes de la región. Buenos aires es, desde sus comienzos, un punto de referencia, y no solo por el puerto o su relevancia comercial, sino que la ciudad se transformó en un espacio multicultural, en donde se desarrollaron diferentes estilos, banderas, idiomas y hasta religiones.

La variedad en este aspecto ha permitido que Buenos Aires construyera una imagen a través del tiempo como una de las ciudades más cosmopolitas del mundo. ¿Qué significa esto? Que en su vasta extensión se pueden hallar rincones que transportan a cualquiera, sin viajar. Con un mero golpe de vista podés estar en Madrid y al rato en París, Londres o hasta la mismísima China.

Un poco de historia

Hace más de cinco siglos, Santa María del Buen Ayre, que luego pasaría a llamarse Buenos Aires, fue fundada por Pedro de Valdivia. Como excolonia, la población que se naturalizó como criolla tuvo desde un comienzo una fuerte influencia de España, pero también de Italia y otros países (Alemania, Francia, Inglaterra), con grandes oleadas de inmigrantes que arribaban desde aquellas tierras, situación que se acrecentó en el siglo XX, con las guerras mundiales que se sucedieron y una nación que ya era ciertamente independiente.

La impronta que establecieron las corrientes migratorias se ve plasmada en las calles de Buenos Aires hasta el día de hoy. De hecho, uno de los motes de esta importante urbe es el de “la París americana”, por la adopción de la arquitectura tradicional del país europeo en los edificios y pasajes más importantes de la ciudad.

Caminar por París sin salir de Buenos Aires

Más allá de la curiosidad del apodo, es posible afirmar que la Capital Federal tiene rasgos de París, sobre todo cuando se pone el foco en dos zonas en particular. Una es el famoso y exclusivo Barrio Parque, que, aunque definido así parece algo inaccesible, lo cierto es que se trata de calles abiertas que están al alcance de cualquier turista, interno o externo, que quiera comprobar su bella disposición.

También conocido como Palermo Chico, el barrio se extiende apenas por 6 cuadras, tomando como referencia la avenida Figueroa Alcorta, que es la calle más importante que lo cruza. Se trata de un área residencial, con varias embajadas, que emana una tranquilidad que sorprende por la cercanía que tiene con puntos de alta concentración de gente, como la estación Retiro o el propio Obelisco. Hay calles enteras que gozan de una homogeneidad atrapante en su arquitectura y que verdaderamente le hacen pensar a uno que puede estar situado en algún rincón de la capital francesa.

La calle arroyo tiene ese je ne sais pas que

París y Buenos Aires vuelven a conectarse de manera directa en la calle Arroyo. Continuación natural de la avenida Alvear, es uno de los pasajes más pintorescos de toda la ciudad, escoltado por edificios, palacios y residencias históricas de estilo francés. Va desde la junta entre Juncal y Esmeralda hasta la plaza Carlos Pellegrini.

Arroyo quizá sea la representación más “parisina” en Argentina, siendo que en ella se encuentran edificios como la Torre Bencich, el Palacio Pereda (actual embajada de Brasil), la hermosa embajada de Francia (no podía ser de otra manera) y el gran edificio proyectado por Eduardo Le Monnier (cruce con la calle Libertad). Cruzando la avenida 9 de Julio, las demostraciones arquitectónicas continúan, pero se les suma además una oferta comercial, gastronómica y de galerías de arte inclusive.

El aspecto que generan los locales ubicados sobre esta pequeña arteria en el barrio de Retiro es muy similar al que se puede ver al caminar por la rue Saint Rustique, Montergueil o Vieille du Temple, en la capital europea. Además, una vez al mes se lleva adelante un evento que resalta todas las cualidades de la calle: “Noches de Galería”, con entrada gratuita.

Cultura inglesa en un barrio típico de Buenos Aires

Si se piensa en la adopción de conceptos provenientes de Inglaterra, el ícono más fácil de reconocer es la Torre Monumental, mejor conocida como “la Torre de los Ingleses”, ya que su construcción estuvo a cargo de residentes británicos en el año 1916, con motivo de conmemorar el centenario de la Revolución de Mayo. El reloj que se encuentra en la cúpula es de la prestigiosa relojería inglesa Gillett & Johnston de Croydon, mientras que la melodía original es los “Cuartos de Westminster”, la misma que tiene el Big Ben, en Londres.

Ubicado en el centro de la plaza Fuerza Aérea Argentina, se erige por 60 metros, dando la posibilidad de observar, a través de un mirador en lo alto, el Puerto de Buenos Aires. Al frente, la acompaña la estación de trenes de Retiro, otra icónica construcción con tono inglés.

Belgrano con R de Reino Unido

Sin embargo, recorriendo uno de los barrios más aclamados de la ciudad, uno puede encontrarse con joyas arquitectónicas que, en combinación con el contexto de ciertas calles, terminan por dar una visual que permite viajar a la isla anglosajona. El lugar en cuestión es Belgrano R y más precisamente la avenida Melián, partiendo del cruce con La Pampa y hasta la intersección con Olazábal. Son cinco cuadras de empedrado y una arbolada preciosa que cubre el espacio aéreo sobre la calle como si fuera un techo natural. En los costados, detrás de los árboles, veredas anchas y casas de estilo Tudor, uno de los predilectos de la historia inglesa.

De Londres a China en minutos

La belleza de una ciudad cosmopolita como lo es Buenos Aires radica en la posibilidad de trasladarse de un rincón del mundo a otro en poco tiempo. Sucede con la cercanía de lo descrito anteriormente como un pedazo de cultura británica en el barrio de Belgrano R, con el famoso Barrio Chino, que se encuentra en Belgrano, del otro lado de la avenida Cabildo, en dirección al Río de la Plata.

Un paseo de los recomendados y de los que no pueden faltar cuando se recorre la ciudad. Sushi al paso, helados Melona, panqueques dorayaki, tiendas repletas de artículos exóticos y restaurantes tradicionales con comidas típicas de esta cultura tan particular. La decoración y el color se trasladan también a las calles, todo es como estar en China, pero en plena Capital Federal.

Más de Asia en Buenos Aires

Y así como está china, también está Japón. El Jardín Japonés supone otra conexión estrecha con el continente asiático. Inaugurado en mayo de 1967, fue proyectado y construido por la colectividad japonesa, con la idea de crear un hermoso lugar para el encuentro con los príncipes herederos al trono imperial en ese entonces, quienes tenían planeada una visita histórica a nuestro país. En tan solo 50 días se consiguió reunir los fondos suficientes para crear semejante belleza.

Un “pequeño Japón en Argentina”, un “pulmón de armonía y paz en medio de la gran ciudad”. Sus lagunas, su vegetación radiante, sus puentes coloridos que conectan un espacio verde con otro, son una obra de arte natural, de enorme prestigio. Ha sido declarado de interés turístico, histórico y artístico, tanto por la Ciudad como por la Nación, y se lo puede visitar todos los días, así como disfrutar de las mejores piezas del verdadero sushi nipón en su restaurante.

¿Manhattan o Puerto Madero?

En este punto ya se puede decir que, además de cosmopolita, Buenos Aires es una ciudad ecléctica, con cambios de ritmo constantes, paisajes que van de una costa del mundo a la otra. Queda más claro cuando, al asomarse por las cercanías de Puerto Madero, las interminables torres de edificios vidriadas de las compañías más importantes que habitan la ciudad comienzan a copar la escena y a entregar una imagen que se asemeja a la mismísima Manhattan, en Nueva York.

Con el río de testigo, que podría ser el Hudson o el East River, la zona es uno de los puntos más importantes en el plano turístico de la city porteña. Gastronomía de alto nivel, paseos, brisa costera, el puente colgante de la mujer y embarcaciones de fondo, todo al pie de imponentes edificios que en la foto final lo ubican a uno entre la isla neoyorquina y el lujoso barrio de Buenos Aires.

Más rincones del mundo para ver y conocer

La lista sigue. Una de las semejanzas que más se sienten es la de Madrid: la capital española y la argentina comparten mucho de su fisonomía. Además, edificios como el Teatro Colón, el Ateneo Grand Splendid, la Catedral Metropolitana, la catedral de la Facultad de Ingeniería (UBA), el edificio de la Facultad de Derecho (UBA), la mezquita, el cementerio de la Recoleta, Caminito en La Boca, todas son referencias del mundo insertas en Buenos Aires, la ciudad cosmopolita por excelencia.