El equilibrio como base para evitar la pérdida de memoria
El estilo de vida llevado adelante a lo largo de los años tiene diferentes repercusiones al alcanzar altas edades. En este sentido, siendo el envejecimiento una de las principales causas del deterioro cognitivo leve, además de los factores genéticos, resulta fundamental mantener buenos hábitos. Por lo tanto, contando con un buen equilibrio en aquellos aspectos físicos, intelectuales y sociales es posible prevenir o retrasar el avance del deterioro cognitivo.
Consecuencia del aumento de la expectativa de vida a nivel mundial, los problemas relacionados a la memoria también han expresado un crecimiento. Es así que un estudio de la Organización Mundial de la Salud estima que entre el 25% y el 30% de las personas con 85 años padecen de un cierto grado de deterioro cognitivo. Por otro lado, dentro de aquellos posibles síntomas que se manifiestan en estas situaciones, se ubica la dificultad para poder recordar compromisos, fechas y el olvido de la ubicación de algunos objetos. Además, en la interacción con otros también puede darse la repetición de comentarios, irritabilidad o impaciencia.
Acerca de algunos ejercicios para mantener la mente activa, se hacen presentes los juegos de estrategias o de ingenio. Estos son grandes colaboradores para estimular la actividad cognitiva. Por otro lado, poder mantener una vida sin estrés y alejada de la ansiedad también contribuye a cuidar de la salud mental. Además, otro aspecto ligado al consejo anterior es poder contar con pasatiempos que generen satisfacción y despejen la mente.
Cuál es la definición de deterioro cognitivo leve y la importancia de trabajarlo
Aquella reducción de cualidades en la actividad cognitiva al transcurrir los años puede ser diagnosticada como deterioro cognitivo leve. En esta línea, la misma se entiende como una etapa en donde se presentan ciertos fallos en la memoria junto a un detrimento objetivo de la misma. Sin embargo, cabe destacar que estos casos no afectan de manera directa o completa a la realización de las actividades cotidianas. Además, la ralentización en el procesamiento de aquellas áreas cognitivas puede ocurrir como un hecho natural, y esto no quiere decir que se haga presente una disminución de tales capacidades.
Estar pendiente de posibles alertas ante la pérdida de memoria es fundamental por varios motivos. Por un lado, en caso de tener un deterioro cognitivo leve, estar atento a los síntomas permitirá contar un diagnóstico en el menor tiempo posible. Por otro lado, también provocará aplicar mayor dedicación en los hábitos saludables. En este sentido, es importante saber que estos casos no necesariamente son progresivos, sino que en muchas oportunidades los mismos se detienen en un cierto punto o incluso mejoran.
Recomendaciones para mantener activa la memoria
Poder prevenir, retrasar o detener el envejecimiento cognitivo significa tener en cuenta ciertos aspectos de la cotidianidad. Al transcurrir los años las posibilidades de que el deterioro de memoria se haga presente aumenta, es por eso que existen algunos consejos que se pueden considerar para que esta realidad logre ser revertida o no progrese más rápido de lo común.
Tener una vida social activa con encuentros y reuniones grupales
Si bien fue un aspecto que la pandemia dificultó notablemente, es sumamente necesario poder relacionarse con familiares, amigos y otras personas de manera frecuente. Al estar aislado y en soledad se puede presentar depresión, es por eso que mantenerse activo socialmente también genera que la rutina tenga cierta frescura. Además, este aspecto permite mantener estimulada la capacidad de aprendizaje, continuar realizando ejercicio físico o seguir con actividades culturales aún en tiempos de ocio.
Disfrutar de juegos para ejercitar la mente
Ya sea con familia, amigos o quizás también en solitario, aquellos juegos de ingenio, rompecabezas, crucigramas o de estrategias permiten mantener viva la memoria. Estas actividades generan que la mente preste mucha atención a casos particulares, desarrolle las capacidades lógicas y se enfrente a ciertos retos dentro de los juegos. En este sentido se podría decir que es esta es una especie de gimnasia mental. Por otro lado, teniendo en cuenta las nuevas realidades, los videojuegos también sirven, y más aún si son compartidos con algún compañero.
Mantener una vida sin estrés
Si bien usualmente se tiende a pensar que los fallos de memoria están ligados de manera directa al envejecimiento de las personas, en muchos casos estos pueden ser provocados por cargar con un alto estrés. En esta línea, puede ocurrir que personas de edades no avanzadas presenten alteraciones cognitivas luego de sufrir situaciones estresantes. De esta manera es muy importante atender aquellos problemas emocionales y consultar con profesionales de la psicología.
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Por otro lado, una recomendación que puede resultar muy útil para liberar estrés y distraerse de aquellas situaciones que generan malestar, es contar con una actividad que ayude a distenderse. Si bien deportes como el fútbol pueden provocar el efecto contrario, otros pasatiempos como pintar, dibujar, leer, hacer bricolaje o jardinería son grandes amigos de la mente al mantenerte lejos de las preocupaciones.
Realizar actividad física con frecuencia
Cuando los años transcurren es común relajarse y abandonar la regularidad en la actividad física. Sin embargo, teniendo en cuenta la edad, los tiempos y la capacidad física de cada persona, poder mantener activo el cuerpo y contar con una rutina es un gran método para mantenerse en forma. Al realizar actividad física, no solo se alcanza con mayor facilidad el peso adecuado, sino que también se logra cierta autonomía personal y en muchos casos se generan espacios de encuentros. Además, estos ejercicios suelen mejorar la salud cardiovascular y previenen accidentes cerebrales, los cuales en muchos casos pueden tener consecuencias en el deterioro cognitivo.
Tener una alimentación saludable
Dentro de la inmensa variedad de dietas existentes, algunas de ellas priorizan aquellos alimentos que contribuyen a cuidar aspectos de la salud mental, por ejemplo las verduras, las frutas y el pescado. Acerca de estas recetas, la mediterránea es una gran opción. Evitando consumir alimentos ultraprocesados y las carnes rojas, llevar adelante una alimentación sana resulta sumamente importante para ingerir nutrientes que tengan un efecto protector del cerebro y de muchas otras enfermedades.
En este sentido, aquellos alimentos que cuentan con grasas vegetales, vitaminas, sales minerales y antioxidantes son los ideales. Entre algunos de ellos se encuentran las anchoas, el aceite de oliva, las uvas y los frutos secos. Además, cabe resaltar que es importante evitar el consumo de drogas, alcohol o tabaco, ya que los mismos también inciden en la capacidad cognitiva.
