El desayuno es un paso fundamental para sostener una buena salud diariamente

El organismo de una persona, funciona con combustible y la alimentación es precisamente lo que genera tal combustión como para que el cuerpo responda a los estímulos y exigencias del día a día. Si seguimos con la analogía con las máquinas, cargar el tanque por la mañana con un buen desayuno, es fundamental. Una correcta alimentación, ayuda a que cualquiera pueda afrontar los compromisos de su cotidianeidad de mejor forma, así como también evita muchos inconvenientes de salud, derivados de un mal funcionamiento de los órganos, debido a una tener que sacar energías de donde no las hay.

Claro que acumular energías, que se expresan en calorías, carbohidratos, vitaminas, proteínas y más, tiene que luego estar complementado con un buen programa de ejercicio físico, que permita transformar todo lo ingerido en beneficios para la salud del cuerpo y la mente. Tampoco es solo el ejercicio físico, también otras actividades que ayudarán a completar el combo, como pueden ser salidas en tiempo de ocio, hobbys, relajación, un buen descanso y más, pero teniendo en cuenta que siempre, todo comienza con un primer paso y en orden cronológico y de importancia, ese primer paso fundamental es el desayuno. 

¿Por qué se dice que el desayuno es la comida más importante del día?

Hay 4 comidas estipuladas durante el día que son las que todos deberían poder cumplir. En orden de horarios, se establecen como: desayuno, almuerzo, merienda y cena. Sin embargo, hay una frase y concepción de dominio popular, que sería difícil de rastrear quien la impuso o la popularizó, que marca que el desayuno es la comida más importante del día, a la que debe prestársele más atención, por sobre el resto y que de hecho la concepción de ingesta de energías, debe ir disminuyendo, siendo la cena la comida más liviana en ese caso.

Esta idea o consideración sobre el desayuno y su carácter más que fundamental, siendo la comida más importante del día directamente, no es del todo cierta. Los expertos y hasta la propia Organización Mundial de la Salud, no estipulan que haya una comida de mayor relevancia, por sobre el resto. Sin embargo, el desayuno no deja de ser fundamental y no debe omitirse nunca, ya que los alimentos que se ingieren en la mañana, son los primeros después de un largo periodo de ayuno provocado por las horas de descanso y en las que una persona duerme. Además, el desayuno antecede lo que serán las horas del día con mayor carga y gasto de energía, es decir que es la comida que tendrá que llenar de energías al cuerpo para afrontar las actividades que siguen en la jornada. 

Beneficios del desayuno en la salud y su importancia para un correcto desempeño del organismo

Al desayunar, el cuerpo repone los niveles de glucosa, en otras palabras, se carga de energía y esa es la primera razón por la cual el desayuno se torna fundamental. Es que al dormir y en las horas de sueño, los niveles de azúcar en sangre bajan y al levantarse, una persona prácticamente no tiene energías con las que encarar el día. Es mediante la ingesta de alimentos en el desayuno justamente entonces, que se nivelan los valores de glucosa en sangre y el cuerpo se activa, como si se prendieran las luces del organismo.

Según investigaciones y estudios elaborados por especialistas y profesionales de la nutrición, aquellas personas que desayunan tienen mejor predisposición natural a llevar una dieta equilibrada, al igual que tienen menor riesgo de sufrir enfermedades o desbalances en su alimentación, como puede terminar siendo un problema de obesidad por ejemplo, que a su vez luego deriva en complicaciones cardíacas, respiratorias y hasta de movilidad.  

El desayuno es fundamental para activar el cerebro, músculos y sistema nervioso

La alimentación y lo fundamental del desayuno no está solo en llenar el estomago y brindar energías al cuerpo, sino que para el cerebro es clave la glucosa. De hecho es el combustible mediante el cual el mismo se activa y al no poder almacenar, se requiere que todos los días se vuelvan a reponer esos niveles de azúcar básicos, de otra manera será muy difícil despertar por completo las funciones cognitivas. 

Con los niveles de glucosa correspondientes, la capacidad de concentración aumenta y no solo eso, porque todas las demás habilidades que dependen del cerebero, pueden estar al 100% de su potencial. Sucede lo mismo con los músculos, que si no reciben su estímulo y dosis de glucosa necesaria, reflejarán fatiga, algo que se traslada como una sensación de cansancio general en el cuerpo. Un cuerpo cansado, es menos productivo y además propenso a sufrir accidentes, sean de menor o mayor escala de gravedad, dependiendo las tareas que cada persona deba cumplir durante el día. 

Siempre hablando de la glucosa en sangre, hay que destacar que también es básica para nutrir al sistema nervioso. Se trata del único alimento que las neuronas procesan y consumiendo la cantidad correspondiente, se da un efecto tranquilizante sobre las mismas, lo que permite mayor lucidez y un estado mental óptimo

Atención: la glucosa debe ser medida

Una cosa es que el cuerpo necesite glucosa para recuperar valores que le permitan funcionar de la mejor manera y otra distinta es creer que la glucosa o azúcar se trata de ingerir caramelos, golosinas u otros alimentos dulces como pueden ser los de pastelería. La glucosa se encuentra en muchos otros alimentos, que además son saludables en el resto de su composición. Frutas, verduras y otros alimentos saludables son una gran fuente de proteínas, vitaminas y claro, glucosa.  

Lo fundamental del desayuno en la niñez

En el caso de los niños, el desayuno toma un rol un poco más importante. Al encontrarse en época de desarrollo, tanto su cuerpo como cerebro, dependen en gran medida del consumo regular de alimentos y de cumplir con ese esquema de alimentación de 4 comidas ya mencionado. También, como se dijo, el desayuno es la primera comida del día y se vuelve fundamental para afrontar el día, lo que en niños en edad escolar es esencial, ya que tienen que poner en funcionamiento sus habilidades cognitivas en el colegio. Los desajustes en la alimentación, en la niñez, pueden llevar a problemas que afecten su aprendizaje y formación física. 

¿Cómo es un desayuno ideal desde el punto de vista de la salud?

Un desayuno saludable, debe contar necesariamente con la combinación de distintos aportes proteicos, provenientes de una gran cantidad de alimentos posibles, pero que se pueden generalizar según su condición o categoría. Luego, cada persona podrá decidir aplicar, a gusto personal, la selección de alimentos que quiera de cada uno de los grupos. 

El primero, que ya se mencionó por su aporte de glucosa, es la fruta. Sea en formato jugo, mermelada o en su formato original, es decir la pieza entera, lo importante es que en el desayuno se incorpore un estímulo frutal. El segundo, son los hidratos de carbono, entre los cuales los más comunes son el pan, los cereales, las galletas, que si son integrales, será mejor ya que sumarán fibra al organismo. El tercer punto, son los lácteos, como leche, yogurt o queso, aunque luego cada quien decidirá que es lo que prefiere o si hay algún otro lacteo que prefiera incorporar. Finalmente, el cuarto grupo que no puede faltar, es el de las proteínas, ya que dotan al desayuno de esa dosis fundamental de energía extra. En otras culturas es más común, quizás no tanto en Argentina, pero es bueno sumar por ejemplo huevos o jamon o en todo caso, unos buenos frutos secos tipo almendras, nueces o avellanas.