Las llamadas "Ecowaking communities" o ciudades caminables tienen un impacto muy positivo en la calidad de vida de los usuarios: fomentan el sentido de comunidad y el ejercicio físico, reducen la contaminación y priorizan la cercanía para resolver diferentes necesidades de la vida diaria.
Distintas formas de compartir
Tres edificios constituyen el corazón de la “manzana uno” de Puertos, la misma que da comienzo al área de densidad media de la urbanización. El Edificio Plaza incluye comercios y servicios en la planta baja, y estudios y consultorios médicos en los pisos superiores; y las Vilas cuenta con diez townhouses que ofrecerán en sus esquinas boutiques y cafés. Residencias del Lago, por último, despunta gracias a sus vistas plenas al Lago Central con unidades de 2 y 3 ambientes.
Residencias del Lago forma parte de un proyecto que invita a otros grupos de convivencia a descubrir Puertos. Las urbanizaciones cerradas tienden a atraer solo a familias nucleares; pero hoy la sociedad es más compleja. Por eso, en esta primera manzana de media densidad se buscaron soluciones para los distintos momentos en la vida y las necesidades que conllevan. El edificio fue pensado para parejas o familias jóvenes que buscan menos metros cuadrados, estar próximos al centro comercial y dentro de la oferta edilicia de la ciudad”, explica Marcelo Faiden, arquitecto y responsable junto a Sebastián Adamo (Estudio Adamo-Faiden) del diseño y la supervisión de la manzana uno.
El concepto de movilidad sustentable resulta inimaginable sin la bicicleta, y para promover su uso la infraestructura de ciclovías resulta un aspecto fundamental.
Una experiencia residencial diferente
La premisa que desde el principio orientó el proyecto de la manzana uno en general y de Residencias del Lago en particular es la de la conexión: los tres bloques se vinculan entre sí a través de un patio central semiprivado que ordena el uso comunitario, se abre a las visuales externas y vincula los diferentes ingresos al sector.
“Estar en contacto con la naturaleza, y al mismo tiempo generar pulso urbano. Recrear una ciudad caminable, abierta, que tuviera usos mixtos. Esos fueron los retos de este proyecto que desde el principio tuvo para nosotros un interés muy especial y que será capaz de generar una experiencia residencial diferente”, resume Faiden.
Incluir en nuestras casas especies de árboles y plantas nativas. Al estar adaptadas al entorno, tienen menores requerimientos de agua y contribuyen a sostener el equilibrio del ecosistema. El Centro de Sustentabilidad de Puertos brinda asesoramiento a vecinos y visitantes sobre la vegetación autóctona, y la eligen para los espacios comunes.
En Puertos podés disfrutar de lo mejor de la vida urbana, fuera de la gran ciudad y muy cerca de la naturaleza. Ahora es el momento de un cambio irrepetible.