Una tradición que pisa fuerte en el diseño de una casa

El ritual de prender el fuego, reunirse cerca del asador, charlar, compartir un aperitivo o una bebida, seguir el proceso de cocción de la comida de cerca, es naturalmente una tradición con el sello de Argentina. Sin importar el tipo ni el estilo que se elija para el diseño de una casa, cuando alguien planifica construir siempre tiene en mente la parrilla. ¿Dónde va a ir? ¿Será que hay lugar en el jardín?, quizás los más osados hasta planean un área cubierta con salida al patio para levantar allí un espacio de reunión, en donde la estrella, la vedette, siempre es la parrilla. 

La estética es importante, porque no se trata de poner una parrilla a como de lugar, sino que lo fundamental es lograr amalgamar el diseño con el estilo general de la casa, acompañando así de forma funcional y práctica, sin desentonar y, por el contrario, siendo un elemento de valor. Además, su construcción debe ser planificada por el hecho de que será una herramienta en la cual se manipulará comida y, sobre todo, se realizarán fuegos controlados

Consejos para llevar a cabo una parrilla estelar en casa

Seguí estas recomendaciones para planear el diseño de la parrilla de la mejor forma posible. Luego, solo queda ponerse el delantal y disfrutar asando tanto como se pretenda.  

Ubicación 

El lugar elegido para la parrilla es el primer aspecto clave a resolver y son varias las razones para tener en cuenta. En primera medida, hay que conocer la orientación del viento que regularmente llega hasta esa zona, normalmente suele ser el patio, para evitar que las ráfagas den de forma directa en el fuego, acelerando la combustión y provocando que el humo se vaya hacia las zonas donde la gente se sienta a comer o mismo el interior de la casa

Otra cuestión elemental es la de construir la estructura alejada de árboles, plantas grandes u otros elementos que pueden llegar a verse afectados por el fuego, la emisión de calor y los chispasos que resulten de la combustión de la leña o carbón quemándose. Finalmente, también hay que pensar en la distancia de la parrilla respecto a la mesa o la ubicación de quienes van a comer, ya que lo ideal es que no esté demasiado cerca, pero tampoco a una longitud incomoda de transportar la comida una vez que esté lista. 

Desde la base hacia arriba

Muchos se quedan con que lo fundamental está en los ladrillos refractarios, el hierro de la parrilla o la campana, pero antes que todo eso, lo más importante es sentar las bases de la estructura. Aunque es posible construir todo, desde la parte baja, con ladrillos o bloques, lo ideal es hacerlo con una losa de hormigón, levantada como mínimo a unos 80 centímetros del suelo. Luego, se continúa planificando una boca de acceso o zona de fuego (140 centímetros de ancho, por 80 de alto y 70 de profundidad como estandar). Por supuesto que toda la superficie que entre en contacto con el fuego debe estar cubierta por ladrillos refractarios

Una vez establecido lo básico, se le pueden sumar más o menos funciones, a gusto. Por ejemplo, al área de la parrilla se le puede aportar un espacio para brasas, con o sin brasero, eso será a pedir de cada quien. Espacios de guardado para las herramientas, mesada para trabajar la comidad con comodidad y un sector de pileta o lavabo también, como para que quede como una cocina exterior.

Los famosos fierros

El diseño puede ser bello, la funcionalidad del espacio en su totalidad impecable, pero todo puede quedar arruinado si no se le presta atención a la parrilla en sí, los fierros. Esta parte determinará no solo la capacidad, sino el modo de cocinar. Una extensión de 60 centímetros de ancho por 90 de largo se entiende como lo normal, ya que es una medida capaz de albergar un asado como para 8 personas aproximadamente. En caso de querer algo más grande, lo aconsejado es estirar hacia los costados y no en profundidad. 

Yendo al material, lo más estandar y que mejores críticas recoje es el hierro redondo y liso de 6 milímetros. Se trata de una elección económica, que se ve bien en cualquier diseño y que resulta fácil para mantenerla limpia. Compite principalmente con la variante moderna del hierro en V, con un borde para contener la grasa que cae debido a la inclinación, sin embargo con frecuencia esta opción puede terminar siendo incómoda para los asadores, sobre todo para aquellos sin tanta experiencia.

Que el humo no tape el asado

La campana es una parte fundamental y sin una que sea adecuada, el proceso de un asado puede verse completamente afectado por el humo, que no se va por donde corresponde. Orientación del viento, tiraje largo, mientras más alta la chimenea será mejor, agregar un pulmón y que la boca no sea demasiado grande, esos son los puntos a repasar y considerar para que la campana cumpla con su cometido y el humo no sea un problema. 

Diseño coherente al entorno

Como se venía mencionando, el diseño de una parrilla debe coincidir con lo que la casa muestra, no sirve de nada que se vea como algo extra o separado, porque puede generar una mala imagen y restar al valor final de la casa, además de que para quienes vivan allí sería molesto tener un sector que no sea coherente al resto.

Conseguir una armonía con el entorno entonces será clave, aun mejor todavía si se siguen tendencias de la arquitectura más actual y moderna, integrando la zona de parrilla a la galería, como una continuación o bien como parte de un quincho.