Los beneficios de consumir carne
Todo el mundo habla de lo positivo que es comer carne ¿Pero cuáles son realmente sus beneficios?
En primer lugar, es una gran fuente de vitamina B12, hierro y zinc, por lo cual es importante para prevenir ciertas enfermedades, como puede ser la anemia. Debido a ello, se considera a la carne roja como un elemento esencial en cualquier dieta saludable y equilibrada.
En esa línea, su consumo ayuda a fortalecer y construir los músculos, por lo cual aporta a un mayor rendimiento. Incluso, algunos especialistas aseguran que el consumo de carne es esencial para un óptimo funcionamiento del cerebro.
Por otro lado, se considera un alimento que por su composición es súper saciante. Aun así, varios nutricionistas recomiendan limitar el consumo de carne roja a 2 o 3 veces por semana. Por todas estas razones y muchas otras, incluir carne roja a la dieta diaria contribuye a lograr un hábito de vida saludable.
Consejos para manipular la carne
Es importante tener algunos puntos en cuenta al momento de cocinar carne roja, entre los principales se puede pensar en su conservación y manipulación.
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Tener cuidado con la cadena de frio
Una correcta temperatura en la cadena de frío puede evitar la reproducción de microorganismos, por ese motivo, al momento de guardar carne en la heladera se debe pensar en colocarla entre sobres o en tupper que permitan mantener una temperatura constante, en ese caso, intentar no dejarla más de una semana. Por otro lado, si se va a congelar la carne, al momento de descongelarla, se debe hacer lentamente para no alterar el sabor o la textura de la misma.
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Evitar la contaminación cruzada
Este punto se refiere a los utensilios que se utilicen al momento del corte de la carne. Ya sea el cuchillo como la tabla, lo ideal sería que se usen únicamente para la carne, para justamente evitar cualquier posible contaminación cruzada con otros alimentos. En ese caso, esos elementos deben ser desinfectados y lavados en profundidad luego de su uso.
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Los puntos de la carne ¿Cómo identificar cada uno de ellos?
Cuantas veces uno va a un restaurante y el mozo pregunta a qué punto desea la carne, eso se debe a que para gustos no hay reglas, y la cocción de la carne es parte de ese lema. Al momento de distinguir entre los distintos grados de cocción, el color de la carne es lo que marca la diferencia.
Bleu
No es el elegido de la mayoría, pero siempre hay un grupo de personas que lo prefieren siempre. Se trata del nivel más bajo de la cocción, el más crudo de todos. La idea es cocinar el filete durante 2 minutos, así queda sellada la parte externa por ambos lados, y al cortar la carne se ve bien roja. De esta forma el interior quedara apenas tibio y con una textura flácida.
Punto medio
Para muchos es el punto ideal, a diferencia del anterior, el tono rojo en el centro sigue estando pero no es tan intenso (es más cercano a un rosa). Se caracteriza por ser el punto más jugoso, el que un 50% es de carne cocida y un 50% de carne roja. Debe ser cocinado a fuego medio, aproximadamente 6 minutos de cada lado.
A punto
El interior comienza a perder el color rosado y la carne se convierte en un tono totalmente marrón, aunque igualmente se mantiene una suavidad característica. La cocción es más larga y menos jugosa que la anterior, se cocina por 15 minutos a fuego bajo.
Cocido
Es la manera de preparar la carne más elegida. Principalmente, es el punto de cocción más alto, es decir, un trozo de carne cocido al 90%, perdiendo el color rojo en su totalidad. Al probarla, su textura es más resistente y seca, incluso su sabor se intensifica, se recomienda cocinar alrededor de 30 minutos, dependiendo el grosor de la carne.