Los tipos de puertas según las necesidades del hogar
Al hablar de puertas, las primeras ideas que llegan a la mente están relacionadas con la seguridad o la privacidad. Sin embargo, cada detalle de una casa hace a los ambientes y aportan esa cuota de estilo distintivo. Es así que si bien a primera vista parece que las puertas no influyen en lo decorativo, ellas también resultan un objeto muy importante para adaptar un ambiente y dotarlo de personalidad. En esta misma línea, las puertas también cumplen diferentes funciones. Por ejemplo, en relación al aislamiento térmico y acústico. Es así que dependiendo del material y sus terminaciones será posible alcanzar diferentes resultados.
En otros aspectos, también es importante considerar que cada puerta debe ser colocada en relación a la distribución y a la organización del espacio. De esta manera, será posible aprovechar hasta el último centímetro. Por otro lado, modificar las puertas de interior también puede ser una gran herramienta para transformar y renovar por completo el hogar. Es así que eligiendo el acabado de las mismas se puede potenciar el estilo del ambiente, ya sea rústico, moderno o minimalista. A su vez, si se busca un estilo tradicional por ejemplo, se puede optar por modelos clásicos con molduras detalladas.
Animarse a que las puertas se conviertan en protagonistas puede ser una gran idea. No obstante, buscar la mimetización del espacio también es una propuesta que ayuda a mantener una línea. En este sentido, acerca de los posibles acabados de puertas de interior, se pueden mencionar las puertas lacadas. Además de ser un acabado resistente, el mismo representa un estilo moderno y distinguido. Por otro lado, apostar por un color que salga de lo típico puede cargar de personalidad el ambiente. Es así que aquellos tonos oscuros como el azul petróleo o el negro provocan un impacto de elegancia notable.
La importancia de tener en cuenta el espacio al elegir una puerta
Si bien decidir en función de la estética y el diseño que se le quiera dar al ambiente es lo principal, el espacio con el que se cuenta es un punto que no se debe olvidar. En este sentido, este será determinante en relación al tipo de apertura para las puertas de interior. Por lo tanto, si bien las puertas abatibles resultan ser las más habituales, existen otros sistemas a los que se le puede sacar mucho rédito.
Con puertas corredizas, por ejemplo, se pueden ganar muchos centímetros. Aunque su implementación sea diferente a las de apertura abatible, no dejan de ser sencillas de instalar. Además, aumentar el espacio libre vale la pena. Una variante a partir de las mismas es pintarlas del mismo color que la pared. De esta manera, quedan ocultas a la vista y se logra un efecto visual interesante, permitiendo despejar el campo visual y generando un ambiente limpio. Por otro lado, las puertas plegables cumplen una función similar a las corredizas. No obstante, no necesariamente tienen que ser utilizadas en lugares pequeños. Estas pueden ser de madera, vidrio, combinadas y es posible usarlas como división entre dos habitaciones integradas.
Dejando atrás la perspectiva en relación al espacio, según la apertura de las puertas también se pueden alcanzar sentidos totalmente diferentes en el hogar. Es así que en cuanto a la entrada principal, decidirse por una puerta pivotante es una apuesta muy vistosa. El mecanismo de estas se basa en un perno giratorio en el eje vertical de la puerta que le permite movilidad a la misma. No obstante, si bien aportan una sensación de majestuosidad única, para poder contar con una de ellas inevitablemente se requiere un buen espacio. Es por eso mismo que no común que se utilicen en aperturas de interior.
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Tipos de puertas y sus posibles acabados
Luego de conocer algunas variantes de aberturas, llega el momento de decidirse por el acabado de las puertas. Es así que si bien esta decisión estará influida por el material de la misma, ya sea maciza, enchapado o hueca, el acabado resulta clave para lograr el toque decorativo perfecto. Descubrí las principales variantes.
Puertas lacadas
Hace varios años que las puertas lacadas son tendencia en las casas modernas, y parece que lo seguirán siendo. Estas son aquellas puertas de madera que tienen distintas capas de pintura fina conocido como esmalte laca. Gracias a su superficie uniforme, las mismas resultan muy resistentes ante la humedad y otros factores externos que podrían dañarla. Además, su limpieza es realmente práctica. Por otro lado, su aspecto estético y elegante es muy difícil de encontrar en otros acabados.
El cristal y su potencial iluminador
Ya sea utilizándolo de forma parcial o por completo, la combinación de cristal en las puertas resulta una gran opción para sacar provecho a la luz natural. A su vez, y relacionado a la privacidad, es posible usar aquellos cristales que dejan pasar luz pero no permiten observar que hay detrás de la puerta. Por otro lado, una de las grandes ventajas de los cristales es que no afecta al estilo de la puerta necesariamente. Los cristales pueden ser parte de una puerta de madera, como también de una metálica.
Animarse a un color diferente
Aunque el blanco puede predominar al hablar de puertas, es posible apostar por un aire fresco y renovador. En este sentido, existen opciones de colores más llamativos y algunos más conservadores. Por ejemplo, acerca de este último, un negro mate puede dotar el espacio de modernidad y elegancia. Más aún si las paredes están pintadas de blanco.
Por otro lado, un azul oscuro podría entenderse como un punto medio. Es decir, iría de la mano con buscar una estética sobria y adulta pero un poco más colorida. Yendo un paso más allá, colores como el amarillo puede ser una apuesta interesante y cálida. El mismo no solo es un color muy actual, sino que también llena de vitalidad el espacio.
La gran resistencia del PVC
Libre de mantenimiento y fácil de combinar con los diferentes estilos, el Poli Vinil Cloruro (PVC) es un gran material sintético. El mismo no solo es duradero y de buena calidad, sino que también contribuye notablemente como aislante térmico, acústico y eléctrico. Por otro lado, si se piensa desde una perspectiva amigable al medio ambiente, el PVC también es uno de los plásticos que menos dependen del petróleo. No obstante, relacionado a la decoración puede que este resulte un tanto limitado.
Una opción eficaz y económica: puertas enchapadas
Partiendo de fibras de madera y resinas sintéticas comprimidas, las puertas chapadas cuentan con la capacidad de realizar una imitación muy buena de las puertas macizas. Es así que a un precio mucho más económico, es posible conseguir un material eficiente que satisfaga las necesidades. En esta misma línea, su imitación fiel al color y textura de la madera, permiten que no desentonen en ningún ambiente.
