Un deporte alternativo para disfrutar y compartir

Siendo uno de los deportes alternativos más populares en el mundo, el skateboarding no solo resalta por aquellos espectaculares trucos y la sensación de adrenalina, sino también por sus valores relacionados a compartir entre pares. Es por eso que aquellas personas que se encuentren dando sus primeros pasos en el skate, no solo se descubrirán una práctica deportiva, sino también un espacio de compañerismo. Por otro lado, como ocurre en la mayoría de los deportes, la práctica y la constancia también son fundamentales. En este sentido, existen algunas recomendaciones para facilitarle a los principiantes el primer contacto con el skate.

Una cuestión que resulta obvia a la hora de iniciar el camino en este deporte es que se necesita un único elemento: el skate. En esta misma línea, cuando no se tiene conocimiento sobre este universo, es posible que se presenten varias dudas. Una de ellas estará enfocada en: ¿Cómo elegir el primer skateboard? No obstante, existe una serie de aspectos que deben ser tenidos en cuenta para poder realizar una buena búsqueda de skates y consecuente adquisición. Como suele ocurrir con otros elementos, no es lo mismo comprar un skate para alguien que se está iniciando en el deporte, que comprar uno para un profesional. El tamaño de las ruedas y la flexibilidad de los ejes son algunos de los aspectos que varían.

Por otro lado, una vez ya se tiene el skate, se presentan los primeros desafíos. El miedo puede ser lo más complicado de afrontar en los primeros intentos, pero sin dudas con el tiempo irá disminuyendo. De esta manera, existen dos posiciones básicas una vez arriba de la tabla: la posición regular y la posición goofy. Por otro lado, también resulta adecuado recordar la importancia de comenzar paso a paso. Inevitablemente hay que dejar de lado los trucos en las primeras salidas. La prioridad es comenzar a ganar equilibrio y aprender movimientos sencillos, como por ejemplo girar o impulsarse manteniendo la posición correcta de los pies. Además, un detalle para agregar de este deporte es que no tiene límite de edad. Tanto los adultos mayores como los más pequeños pueden disfrutar de él.

Qué tener en cuenta para comprar tu primer skate

Una vez que está tomada la decisión de comenzar a practicar este deporte, es momento de conseguir un skate. Aunque pueda parecer una tarea simple a primera vista, es necesario considerar algunos aspectos para que la práctica resulte más facil. En esta misma línea, es necesario diferenciar correctamente entre un skate y un longboard. Este último posee una longitud sumamente mayor y presenta una forma más plana. Además, la función del longboard se relaciona mayormente con la velocidad y no tanto al freestyle.

Uno de los puntos a observar al buscar un nuevo skate es su tamaño. En este sentido, lo más útil es analizarlo en relación al número del calzado. Para aquellas personas que calzan entre 34 y 37 el skate mini de 7,0” es el recomendado. Para quienes su talla de pie es entre 37 y 41 se aconseja el skate medio de 7,25”. Finalmente el skate grande de 7,5” es más acorde para aquellos que calzan 42 o más. Por último, aunque suele ser uno de los aspectos más divertidos al elegir un skate, el diseño no debe ser primordial. Este punto debe quedar en segundo plano y hay que priorizar la adaptación del skate y los objetivos personales.

Otro aspecto a tener en cuenta también es el ancho de la tabla. Mientras más ancho sea el skate permitirá tener un mejor equilibrio, sin embargo resultará más difícil realizar trucos. No obstante, como al comienzo no se realizarán trucos complejos, un skate ancho no está mal para principiantes. Por otro lado, el cóncavo del skate también incidirá en el desempeño. En este sentido, aquellos skates con mayores curvatura están diseñados para el freestyle, mientras que las tablas más planas están pensadas para el paseo.

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5 recomendaciones para iniciarte en el skateboarding

El principal objetivo al comenzar en el mundo del skateboard debe ser lograr dominar con soltura el skate. Es por eso que existen algunos consejos claves para lanzarse y olvidarse del miedo de manera paulatina. A continuación podrás conocer cuáles son los primeros pasos para lograr dominar el skate.

Intentar mantener el equilibrio encima del skate

Al igual que ocurre con los demás deportes en donde se utiliza una tabla, la lateralidad en el skateboard es clave. En este sentido, es necesario colocar un pie en la posición delantera de la tabla. Con respecto a cuál de los dos, existen dos maneras: la posición regulargoofy. Acerca de la primera, aquí se coloca el pie izquierdo delante. Por lo tanto el pie para impulsarse será el derecho. En cambio, la posición goofy es a la inversa. Acerca de cuál de las posiciones utilizar, generalmente el pie que aporta equilibrio va en la parte superior de la tabla. Sin embargo, probar será la manera más eficaz de descubrir tu posición.

Intentar impulsarse

Cuando la estabilidad pasa a un segundo plano, es el momento de animarse a patear. Un punto fundamental en este momento es encontrar el espacio adecuado. Si se quiere practicar correctamente es necesario estar en un lugar amplio de superficie llana y lisa. En este marco, una vez arriba del skate hay que dar un impulso firme con el pie colocado detrás. Cabe destacar que si la patada es grande será más fácil mantener el equilibrio. Por lo tanto, si bien el miedo tiende a generar un impulso pequeño, es necesario evitarlo para poder tener mejor estabilidad.

Regresar a la posición inicial de forma equilibrada

Una vez que el skate está rodando hay que retomar a la posición inicial correctamente. Principalmente el pie ubicado en la parte delantera debe ir de forma transversal a lo largo de la tabla. Por otro lado, el pie que ha pegado la patada para impulsarse debe regresar a la parte trasera del skate. Un punto relevante en esta instancia es flexionar de forma ligera las rodillas para mejorar el equilibrio. Además, con el centro de gravedad bajo, también es clave mantener la espalda derecha.

Aprender a girar

Cuando rodar hacia delante ya es un desafío superado, es necesario aprender a doblar. Para lograrlo es necesario llevar el peso del cuerpo hacia delante o hacia atrás mediante el movimiento de los tobillos. La presión requerida para conseguirlo varía según la flexibilidad del eje del skateboard. Por otro lado, una técnica diferente es hacer un kickturn. Para esto es necesario presionar el tail (la parte trasera) y así elevar ligeramente el eje delantero. En simultáneo hay que girar el cuerpo hacia uno de los lados para dar la vuelta. En esta segunda técnica es fundamental no excederse con la presión del pie trasero, ya que sino el skate puede deslizarse de forma repentina.

Olvidarse de los trucos

Como también ocurre en los demás deportes, la práctica y la constancia es la única receta para aprender a andar en skate. En este sentido, entender la importancia del crecimiento gradual es tomar conciencia de que será imposible realizar trucos en las primeras instancias. Por lo tanto, si bien en muchas ocasiones el interés por el deporte nace a partir de observar espectaculares movimientos, hay que saber que eso llevará tiempo. No obstante, una vez dominado el equilibrio, el primero truco a intentar será el popular ollie.