Una tendencia misteriosa, elegante y con historia

Escondidos detrás de una fachada falsa, solicitando contraseñas especiales para su ingreso u ocultándose en algún armario que funcione como puerta secreta, estos bares ofrecen sencillamente un viaje sensitivo en todos los niveles.

Además de sus temáticas detalladamente trabajadas y sus ambientaciones inmersivas, suelen tener tras sus barras propuestas de coctelería de corte internacional que recogen y acumulan premios y reconocimientos de todo el mundo, aportándole a la noche porteña una posibilidad más de brindar experiencias de alto vuelo.

El origen clandestino de los Speakeasy

El nombre con el que se conoce a este tipo de bares tiene un origen histórico muy particular que agrega un toque de magia y explica el gen de su esencia. ¿De dónde viene? Esta denominación se remonta a las primeras décadas del siglo XX y surge en Nueva York, tiempo y lugar de la Ley Seca

Ante la prohibición de fabricar y consumir alcohol, en distintos puntos de la ciudad comenzaron a surgir estos bares a puertas cerradas que se divulgaban de boca en boca. Sus miembros, de forma cautelosa, formaban comunidades que resguardaban el misterio sobre su ubicación y tenían la responsabilidad de invitar y permitir el ingreso de nuevos asistentes

A partir de allí, el concepto de “speakeasy” refiere a la forma en que los clientes pedían una bebida en ese entonces ilegal sin levantar sospechas, ya que los camareros les sugerían que hablaran tranquilos para no llamar la atención. 

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Un recorrido por la noche secreta de Buenos Aires

Cómo decíamos, son varias las propuestas que existen en la capital y todas cuentan con su distintivo especial. En este sentido, destacamos algunas de las más recomendables.

Victoria Brown Bar 

“El nombre de este bar hace referencia a la historia de un amor prohibido plagado de misterio, locura, desencuentro, magia y un final feliz…”, anuncian como presentación sus responsables, haciendo alusión a la historia que eligieron contar: la del supuesto romance entre la viuda Reina Victoria de Inglaterra y su sirviente escocés John Brown. 

Con este hilo conductor, el bar luce una ambientación que toma elementos de la revolución industrial e intervenciones del estilo contemporáneo “steampunk”. Por su parte, Sergio Ancarola, su head bartender, ofrece una carta que es más bien una bitácora de viaje: Te invita a que tomes partido en la travesía de John Brown por las colonias británicas, recopilando sabores exóticos para deleitar a su amada”, relatan. 

The Hole Penitentiary

Inspirado en la mítica prisión de Alcatraz, en la bahía de San Francisco, este speakeasy ofrece una experiencia distinta viajando en el tiempo a los mejores años de la tan afamada penitenciaria que supo alojar a los más grandes y peligrosos gángsters de la mafia del contrabando de alcohol de Estados Unidos.

Todo está atravesado por la temática, desde sus opciones de comida, sus bartenders y, por su puesto, su alta coctelería con tragos basados en presos famosos.

Florería Atlántico

Bajo una pintoresca florería y por medio de una puerta frigorífica escondida en el piso, una escalera te conduce al sótano en donde se encuentra este bar con temática marítima y un clima especialmente íntimo exclusivo.

Catalogado entre los mejores 50 bares del mundo, este lugar imperdible cuenta con una carta de cócteles inspirada en las distintas nacionalidades que fueron parte de la inmigración en el país.

Nicky Harrison

Otro de los speakeasy de Buenos Aires que es reconocido internacionalmente entre los mejores del mundo. Su nombre remite a un joven neoyorquino que fundó una cantina secreta detrás del negocio familiar en la década de 1920.

Su particularidad, en este caso, es que solo se puede ingresar teniendo membresía o cenando en el restaurant que funciona delante y solicitando visitar la “bodega de vinos”. 

Presidente Bar

Adornado con arañas de cristal, un fino mobiliario y una atmósfera teatral de buenos diseñadores, este bar se posiciona también entre los imperdibles y destacados globalmente. No solo resalta su coctelería sino también su propuesta gastronómica, con una fuerte impronta por los sabores nuestros.

Algo para estar atentos, una buena elección en su barra te podrá permitir conocer la biblioteca, su espacio secreto.

La Ley Seca

En enero de 1920 se sancionó en Estados Unidos una ley que prohibía la fabricación, el transporte y la venta de bebidas alcohólicas en todo el país. Sin embargo, estas medidas fomentaron una gran industria paralela que permitía que se pudiera seguir consumiendo este tipo de productos, dándole surgimiento a los speakeasies. Para 1925 ya había 100.000 bares secretos en las principales urbes, de los cuáles 10.000 se encontraban en Nueva York. Finalmente, en diciembre de 1933 se le puso fin a esta controvertida reglamentación.

Descubrí la ubicación de estos Bares Secretos: