El 2022 fue un buen año para el cine y las películas

Luego de dos años de pandemia que llevaron a un cierre de los lugares comunes y donde se reunían habitualmente las personas, entre los que lógicamente ingresan los cines, el 2022 significó un renacer. La industria ha reconocido que, si bien la recuperación no alcanzó los niveles que se traían pre-pandemia de asistencia a las salas, ha sido un muy buen año.

De hecho los números respecto a 2021 se han elevado considerablemente y marcan una tendencia para lo que viene, cargando de expectativas al 2023. Sin embargo, así como al cine en la pantalla grande no le ha hecho bien el tiempo de confinamiento, las plataformas de streaming y de películas en línea si se han beneficiado, de hecho se han multiplicado y eso ha llevado a una mayor cantidad de producciones que no pasan por las salas de cine y se estrenan directamente en los smart TV y otros dispositivos con pantalla de índole personal. 

Netflix mantiene su nivel

Aunque le surgieron múltiples competidores, el gigante de la N supo mantener su rol preponderante en la industria y aún no teniendo los números arrasadores de sus primeros años, sigue siendo la plataforma por excelencia en distintos lugares del mundo, siendo Argentina uno de ellos. 

Las producciones originales de Netflix dan que hablar y hay una variedad de oferta que cautiva al usuario del otro lado. Documentales, series y, por supuesto, películas, incluso con sagas que ganan su lugar entre los fans. 

La película de Netflix que lidera en visualizaciones durante 2022

Una de las películas más populares que estrenó Netflix en el 2022 tiene una serie de argumentos que le aseguraron de entrada un montón de visualizaciones, pero que además con el correr de los días tras su aparición en la plataforma, la crítica también le valió una alta estima de los usuarios.

Enola Holmes 2: una de las mejores secuelas del año

Después de un auspicioso inicio de saga, la hermana menor del famoso detective Sherlock Holmes volvió para una segunda parte, con muchas más aventuras, en el gigante de la N.  La adolescente, que también cumple un rol de detective, es protagonista de una cinta que sigue la línea de la primera película, con un misterio central que ronda sobre el misterio por la desaparición de una persona.

Enola busca seguir haciendo su propio camino y escapar de la sombra de su ya consagrado hermano, representando en ese escenario la diferencia de criterios que existen para hablar de un hombre con las actitudes de Sherlock y de una mujer, como lo es su pequeña hermana. Aunque las críticas en general le dieron algunos votos menos que a la predecesora, lo cierto es que se trata de un filme entretenido, con actores de renombre que lucen muy bien sus papeles y le dan un salto de calidad al guión, que de todas formas acompaña de muy buena manera. 

Reseña de la historia 

Sin caer en los odiados spoilers, hay que decir que la historia comienza poco tiempo después del final de la película anterior, por lo que resulta importante ver la primera película, sobre todo para comprender el desarrollo de algunos personajes.

Yendo a la trama, todo inicia cuando Enola crea su propia agencia de detectives, pero es menospreciada por género y juventud, lo que la lleva al borde del cierre. Sin embargo, oportunamente es contratada por una niña que le solicita encontrar a su hermana desaparecida. Sarah Chapman es el nombre de la joven sin paradero, pero con la información de que trabajaba en una fábrica de fósforos y está siendo ya buscada por la policía. En segunda instancia, Sherlock lucha con la frustración de un caso irresoluto de fraude financiero, que podría estar relacionado con la investigación de su hermana menor.

Conexión con la historia

Una marcada diferencia de esta segunda entrega de Enola Holmes en Netflix, es que a diferencia de la número uno, no es una adaptación de las novelas de Nancy Springer, sino que se trata de una producción basada en hechos reales. De hecho, Sarah Chapman realmente existió y fue una trabajadora de fábrica reconocida por su aporte en la lucha sindical, en la Londres de finales del siglo XIX. Atención a la búsqueda de su nombre en google porque puede generar spoilers, aunque de todos modos la película realiza cambios suficientes para sostener la intriga hasta el desenlace. 

Reparto de lujo

Millie Bobby Brown es la protagonista y encarna nuevamente a Enola Holmes, mostrando una faceta completamente opuesta al papel de Eleven en Stranger Things, que la catapultó al estrellato. En este caso Enola se muestra carismática, divertida, perspicaz y hasta atrevida. Henry Cavill sigue siendo Sherlock y en esta segunda entrega tiene mucho más tiempo de pantalla, logrando una muy buena interpretación del ya tantas veces representado personaje de Arthur Conan Doyle. 

Helena Bonham-Carter retorna también como la madre de los Holmes, junto a Susie Wokoma como su compañera llamada "suffragette". Louis Partridge es Tewkesbury, un Lord de buenas intenciones que desde la primera película cumple el rol de interés romántico de Enola. La ausencia más marcada es la de Sam Claflin como Mycroft, el tercer hermano Holmes, pero no es una pérdida de valor para la historia. 

El villano esta vez es David Thewlis, quien se pone en la piel de un funcionario corrupto, de mucha intensidad y con una tendencia rauda hacia la violencia.