La madera siempre juega: un recurso que no se agota
Las cualidades de la madera son muchas y, además de cantidad, también son importantes en cuanto a la calidad que pueden aportar. En este caso, si relacionamos a este material natural con los muebles de interior, vamos a encontrar que existe una larga lista de beneficios, que puede ser contrastada con algunos puntos en contra, pero que terminará siendo positiva sin dudas.
Claro que para que esos aspectos positivos sean efectivamente una buena decisión, hace falta informarse sobre los diferentes tipos de madera que existen y cuáles son los mejores en relación a los muebles de interior. También respecto a la posibilidad de revestir con madera o utilizar el material para detalles que le den un diseño superior, moderno, de categoría y con potencial para durar muchos años.
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Tipos de madera para muebles de interior: ¿Cómo decidir?
Hay una división principal cuando se habla de la madera como material para elementos de mobiliario o similares. Se distingue entre madera dura y madera blanda, para luego a partir de esas categorías entrar en cuestiones más específicas de cada uno de los tipos de madera posibles para muebles de interior.
Maderas duras
Lo primero que hay que aclarar es que no necesariamente las maderas duras se catalogan así por su dureza propiamente dicha. Se les dice así a los tipos de madera que vienen de árboles angiospermas o, más fácil, los árboles que tienen flores.
Los referentes de esta categoría son el arce, el roble y el castaño. Además, también se los distingue porque son árboles que pierden sus hojas en invierno y se trata de variedades de crecimiento lento, lo que aumenta su valor de mercado. De todas formas, resultan maderas más resistentes y es por eso que se las recomienda para utilizarlas en muebles o revestimientos de exteriores.
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Maderas blandas
Si las maderas duras son recomendadas para el exterior, todo hace suponer que las blandas son las indicadas para el interior y, en efecto, así es. En contraposición, estos tipos de madera se dan en árboles gimnospermas, es decir sin flores ni frutos.
Son de crecimiento rápido y con mayor facilidad de siembra, lo que abarata su valor de mercado y los convierte en aliados ideales para fabricación de muebles de interior. Sin embargo, esto también supone un mayor mantenimiento. El estandarte de la categoría es el pino, debido a que tiene una mejor adaptación a los diferentes tipos de clima y crece más rápido y fácil que cualquier otro, siendo así la opción más económica.
Nogal
La madera de Nogal entra en una subcategoría, considerada semidura. Es de las más resistentes y duraderas, por lo que los muebles de interior que se realizan con ella suelen tener un costo algo superior a otros tipos de madera.
Si bien se trata de una madera fuerte, al tacto es suave y se trabaja de forma sencilla, aún con técnicas manuales. Su capacidad de absorción de los barnices y tintes naturales, permite diferentes acabados. Asegura elegancia y una alta calidad del producto.
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Abeto (de Picea)
La madera de abeto tiene su propia categoría, ya que hay varios estilos y niveles para utilizar. De todas maneras, en todas las características marcan que se trata de una madera definitivamente blanda, aunque con un buen rango de resistencia, lo que permite ser utilizada en muebles de interior y elementos de decoración.
Estéticamente se destaca y se diferencia por sus tonalidades entre blancas y amarillas. Deben mantenerse en lugares secos, nunca afuera, ni cerca de aberturas para evitar que entre en contacto con el exterior y se moje o algo por el estilo, ya que puede mancharse y generar hongos.
Fresno
Otra de las consideradas semiduras, con una resistencia especial a la humedad en este caso. Reune características que la vuelven un tipo de madera ideal para muebles de interior: calidad, flexibilidad y resistencia.
Se da mucho su aplicación en muebles curvos, como pueden ser las sillas, ya que es fácil de doblar en su tratamiento con vapor. Además, es una madera que se utiliza mucho para mangos de herramientas y mangos de elementos deportivos como las raquetas de tenis.