“Este año el foco fue la prevención, sin lugar a dudas. Como guardavidas sé que es muy importante que los chicos esten preparados para cualquier imprevisto. ¿Y qué mejor modo de prevenir que educando, brindando herramientas para la vida? Creo que conociendo a los sesenta y siete chicos que pasaron este verano por “Mini Guardavidas” doy fe de que todos se llevaron algo y eso es la satisfacción más grande que puedo tener”, cuenta Eliana Naón, la instructora.

Los chicos nadan con buzo, jogging, remera, completamente vestidos para simular una situación de emergencia. Emulan rescates con elementos de natación como el “torpedo” (que es el famoso salvavidas naranja). Se familiarizan con los componentes de un botiquín, aprenden maniobras de RCP (Reanimación Cardiopulmonar), ejercicios de apnea (estática y dinámica) y se hace mucho hincapié en la técnica de natación. “Con las herramientas que aprenden  pueden ayudar a un amigo, a un compañero que esté en problemas y no tenga los conocimientos que tienen ellos gracias a esta capacitación”, cuenta Naón que, con solo 24 años, además de guardavidas y profesora de natación, es instructora de salvamento deportivo, entrenadora y técnica en emergencias médicas.

Eliana pide que todas las personas que tengan pileta y niños pequeños “cerquen las piscinas”, ya que eso baja muchísimo la posibilidad de que ocurra algo. “Si el chico tiene que abrir una reja para ingresar a un natatorio, eso reduce exponencialmente el riesgo.

El Coronavirus obligó a armar “burbujas” para formar grupos separados. El Sábado 27 de febrero a las 14.30 hs es el cierre de la actividad que inició la primera semana de diciembre del año pasado, con tres estímulos por semana. Las edades de los participantes van de los 6 a los 15 años. No es excluyente saber nadar. Eliana relata que tuvo casos de niños de 6 años que arrancaron sin saber,  y al finalizar las clases, sacaban a un compañero del agua.

Los pequeños nadadores Valentina y Lucas Pereiro, de 9 y 7 años, cuentan su experiencia: “Lo que más me gusta es compartir el momento con mis amigos, nadar mucho, y me encantó un pic nic que hicimos”, relata Valentina con una gran sonrisa. Y Lucas, su hermano, agrega con muchísimo entusiamo: “Lo que más me gustó fue ¡todo! Por ejemplo: las tablas, nadar, pileta libre, el botiquín. Bueno, como ya dije: ¡todo!”

El objetivo es que “Mini Guardavidas” sea una capacitación de todo el año. El Masterplan de Puertos contempla la construcción de una pileta semiolímpica cubierta, lo que permitirá que esa aspiración sea una realidad".